APRENDIZAJE-ALUMNOS: MOTIVACIÓN
La palabra motivación tiene
su origen del latín movere, cuyo significado es moverse, ponerse en movimiento o
estar listo para la acción. Por su parte, Brophy (1998) menciona que:
“motivación es un constructo teórico que se emplea hoy en día para explicar la
iniciación, dirección, intensidad y persis-tencia del comportamiento,
especialmente de aquel que se orienta hacia metas específicas” (p.3).
En el desarrollo de los
procesos educativos, la motivación es aquel interés que los alumnos demuestran
por su propio aprendizaje y/o por las tareas o actividades que en éste se realizan.
Este interés puede ser adquirido, aumentado, así como mantenerlo en el tiempo, conforme
a las aspiraciones o deseos internos y externos, que los alumnos tienen.
Ahora bien, durante el
proceso de aprendizaje, es relevante y de suma importancia el papel que viene a
jugar el docente para lograr que sus alumnos estén motivados, para lo cual,
debe de dominar muy bien el tema a desarrollar en clase, enseñar con el
ejemplo, crear un ambiente de confianza y respeto para con los alumnos,
potenciar las habilidades de éstos mediante la resolución de problemas. Además,
mostrándose entusiasmado con la labor que realizan y enseñándolos de forma
creativa e innovadora, con metodologías y estrategias educativas que capten la
atención de los estudiantes.
En virtud de lo anterior, la
motivación dentro de las aulas de clase, no puede ser sólo al principio de cada
curso, sino que tiene que mantenerse en el tiempo, hasta que éste finalice.
Ante este reto, tal como lo menciona Navarrete (2009), el docente debería de
plantearse objetivos en su acción motivadora dirigida a sus estudiantes, tales
como: “suscitar el interés, dirigir y mantener el esfuerzo, lograr el objetivo
de aprendizaje prefijado” (p.3).
El proceso
motivacional, suele ser complejo, condicionado en buena parte por la capacidad
de aprender de las personas. Ante esta premisa, el docente debe de tener en consideración que cada alumno se motiva por
razones diferentes, por lo
que, una misma actividad generará diferentes respuestas y reacciones en otros
estudiantes y en el mismo alumno en momentos diferentes. Esto, en la práctica
docente, se traduce en que las acciones motivacionales de tipo colectivo, se
verán limitadas, sino se acompañan de acciones individuales y en atención a las
particularidades de cada alumno, tales como su personalidad, habilidades,
capacidades de aprendizaje, entre otros.
Como los alumnos se motivan de forma diferente, es importante
la búsqueda y la realización de tareas o actividades que fomenten una
participación activa de éstos, puesto que estarán más y mejor motivados,
conforme a más experiencias se generen en el aula, mediante:
- Tareas
de aprendizaje que brinden nuevos retos y desafíos novedosos, innovadores y
creativos.
- La
colaboración a los estudiantes en la toma de decisiones.
- El
fomento en los alumnos, de su sentido de responsabilidad e independencia en el
proceso de aprendizaje.
- La
generación de habilidades de autocontrol.
El tema de la motivación en las aulas y el deseo de los
alumnos por involucrarse de lleno en su propio proceso de aprendizaje, estará
sujeto en gran medida a la labor del docente, dirigida a la buena definición de
las metas a las cuales desea llegar junto con sus alumnos, de tal manera que se
evitará comentarios comunes y típicos tales como: que aburrido o ¿para que me va a servir esto?.......
Excelente tu foto final,resume muy bien lo que los estudiantes piensan, si no hay motivación, carisma y cariño del profesor, los estudiantes no se motivan en aprender, Saludos
ResponderEliminarEstimada compañera:
ResponderEliminarMe parece muy bien su planteamiento de que la motivación debe darse a lo largo de todo el curso y no solamente al inicio o cuando se establecen las expectativas, debe verse como un proceso en cadena, en construcción.
Rescato el punto en el que expresas que la motivación debe darse a lo largo del proceso de enseñanza, evidentemente debe ser constante y permanente. Esto porque es común ver como los y las profesoras, al inicio preparan una clase interesante, llamativa, y activa, y con forme el tiempo pasa, esto va cambiando. ¿Qué les pasa? Acaso se cree que es suficiente motivar al inicio a los estudiantes.
ResponderEliminarSaludos compañera, coincido con usted y las demás compañeras, cuando dice que "la motivación dentro de las aulas de clase, no puede ser sólo al principio de cada curso, sino que tiene que mantenerse en el tiempo".el aprendizaje y por consecuente la motivación que nos lleva a este, debe ser constante y permanente, es decir, nunca se deja de aprender y para ello, nunca se debería querer dejar hacerlo.
ResponderEliminarDinia, me parece muy bien como planteas la motivación por el aprendizaje de los estudiantes. Como bien lo indicas existe la motivación intrínseca y extrínseca dependiendo si es del propio estudiante o si es generada o dirigida por factores externos. Cuando ponemos retos a los estudiantes estos pueden motivarlos, pero cuando se equivocan pueden desmotivarse, sin embargo hay ciertos investigadores que se refieren a la importancia del error como un factor de motivación y de aprendizaje. ¿Piensas que para motivar todo lo que presenta el profesor debe ser fácil para los estudiantes o debe haber retos o situaciones de difícil solución?
ResponderEliminarQuizá una de las problemáticas existentes de parte de docentes y alumnos, es como lo mencionas la ausencia de ese esfuerzo sostenido durante el cuatrimestre o trimestre, por mantener el interés, la novedad, la creatividad en los contenidos del curso.
ResponderEliminarEs claro que si no se incluyen actividades que sean significativas en los procesos de aprendizaje, los cursos se tienden ha convertir en espacios monótonos y tediosos, y ello claro está no apoya ni la creatividad ni la innovación.
Algunos cursos por naturaleza tienden a ser un poco más rígidos en cuanto a los contenidos que se desarrollan, por ejemplo en los cursos de finanzas, existe una carga importante de contenidos numéricos y de análisis, que imposibilitan ser todo lo creativo e innovador que se deseara.
Como lo indicas los alumnos tienen diferentes razones o motores que orientan su motivación, los docentes podemos contribuir a fortalecer esos procesos de motivación si:
1. Demostramos efectivo interés en su aprendizaje.
2. Les enseñamos aplicaciones reales de estos contenidos, de manera que vean que sirven para la realidad.
3. Si demostramos dominio del tema que se enseña.
4. Si generamos un ambiente de confianza y apertura para la interacción.
5. Si promovemos un clima de respecto entre todos.
Les agradezco todos sus comentarios.
ResponderEliminarLa motivación en los estudiantes es muy importante, este proceso debe de darse a todo lo largo del desarrollo de un curso, para mantener cautiva la atención de éstos.
Las estrategias que utilice el docente deberían de ser variadas, creativas e innovadoras, que le signifiquen al estudiante el afrontar nuevos retos, donde manifiesten sus capacidades y habilidades para dar solución a nuevas problemáticas con las que a futuro se han de enfrentar.